¿ES POSIBLE PROVOCAR TORMENTAS EXTREMAS?
Este tipo de preguntas forma parte de los interrogantes que
muchos científicos se hacen y cuyas respuestas son difusas y confusas (al menos
para la mayoría de las personas) porque los proyectos que apuntan al control
climático forman parte de los secretos mejor guardados por diferentes potencias
por sus implicancias militares.
Sin embargo existe
información al menos para dos de los principales proyectos que persiguen este
objetivo. Uno de ellos es el HAARP desarrollado por el Pentágono y cuyas
principales instalaciones se encuentran en Gakona – Alaska, aunque ciertas
investigaciones denuncian la existencia de antenas en Groenlandia, Noruega e
islas del Pacífico. Otro es el proyecto desarrollado por Rusia denominado SURA
cuyas instalaciones están ubicadas cerca del pequeño pueblo de Vasilsursk a
unos 100 km al este de Nizhniy Novgorod, en Rusia.
Las siglas
HAARP, en ingles significan High Frequency Advanced Auroral Research Project. Traducido
al
Los cinturones de Van
Allen (constituidos por electrojets) se sitúan a distancias superiores a la capa
de la ionósfera (350 Km.) y tienden a captar las partículas energéticas que
tratan de irrumpir en la tierra desde el espacio exterior. Esta energía es
electricidad flotante sobre la Tierra y se la llama electrojet aureal. Al depositar mas energía modulada en ella se
modifica el medio, cambiando la corriente y generando ondas LF (Low Frecuency)
y VLF (Very Low Frecuency). HAARP tiene la intención de acercar el electrojet a
la Tierra con el objetivo de aprovecharlo en una gran estación generadora.
Los electrojet
afectan al clima global, algunas veces durante una tormenta eléctrica llegan a
tocar la Tierra, afectando a las comunicaciones por cables telefónicos y
eléctricos, provocan la interrupción de suministros eléctricos e incluso
alteraciones en el estado del ser humano.
HAARP envía los haces de radiofrecuencia dentro de la
ionosfera y así actúa como un gran calentador ionosférico, estos haces pueden
rebotar en la ionósfera por efecto “espejo” o ser recibidos y reenviados por
satélites a cualquier lugar de la Tierra. Algunas investigaciones científicas
han advertido de una relación directa
entre los vientos que se producen en la alta atmósfera y su influencia con el
clima terrestre por un lado y con los electrojets aureales por el otro.
Con el envío dirigido
de estos haces de radiofrecuencia que el HAARP produce se podrían generar
modificaciones climáticas y geofísicas puntuales en ambos hemisferios. La
evidencia científica reciente sugiere que el HAARP está en funcionamiento y que
tiene la capacidad potencial de desencadenar inundaciones, sequías y huracanes.
En cuanto al proyecto
ruso SURA sus objetivos y configuración son similares. Se sabe que estuvo
funcionando e incluso hubo acusaciones de haber producido eventos importantes.
Se ignora si en la actualidad sigue funcionando.
Sin dudas que mas allá de ser experimentos científicos
tendientes a tener mayor conocimiento de la ionósfera y su comportamiento,
estos proyectos son formidables armas de destrucción masiva y como tales deben
ser considerados.
Tomado de envío de red foroba
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